Hace unos días finalizaron las actividades del mes del Patrimonio Cultural, en la que los profesores del Departamento de Historia tuvieron un rol fundamental, impulsando diversas actividades. Esta celebración culminó con la realización del Festival “Nuestros Talentos”.
Conversamos con los docentes Daniel Azúa y Macarena Cruzat sobre lo que significó este mes y sobre sus percepciones de lo que es el patrimonio en relación al colegio y a sus integrantes.
INSTANCIAS DE ENCUENTRO Y REFLEXIÓN.
¿Qué actividades realizó con sus alumnos en este mes del patrimonio cultural? ¿Cuál es la evaluación de éstas?
Daniel Azúa: “Durante el mes del patrimonio cultural trabajamos con los estudiantes desde explicarles lo que significa este concepto, hasta como este se presenta en nuestra realidad. En cada curso quisimos fomentar la valoración de nuestro patrimonio, reconociendo y conmemorando la herencia cultural del entorno cercano de los alumnos. Se les invitó, además, a reconocer lo valioso que es y no tan solo el que se encuentra en la ciudad, sino también se les motivó a reconocerse a ellos mismos como parte importante del patrimonio intangible, ya que la historia la escriben los hombres y mujeres que pertenecemos a esta nación.
Así es que, este año, de forma masiva, el departamento de Historia quiso destacar el patrimonio humano del Colegio Rauquén, que son nuestros estudiantes y todos quienes conforman este establecimiento. Y decidimos organizar un “Festival de Talentos” para reconocer las habilidades de los alumnos que dejarán una huella imborrable en su paso por este colegio. Con el festival quisimos generar una instancia de encuentro y de reflexión en torno a las diferentes manifestaciones del patrimonio nacional, incentivando el respeto a la diversidad de talentos y así reforzar el sentido de pertenencia de los estudiantes hacia el establecimiento.
Otro de nuestros propósitos al desarrollar esta actividad, fue fomentar el respeto a la diversidad y la inclusión, donde los niños, niñas y jóvenes pudieron mostrar expresiones culturales propias de cada uno ligadas a la cultura nacional y curicana, valorando sus habilidades innatas y reforzando las virtudes, lo que permitió que los participantes mejoraran su autoestima y los espectadores manifestaran su respeto hacia sus pares durante las presentaciones.
A modo de evaluación, consideramos que la iniciativa fue un éxito en ambos locales: cantantes, bailarines, deportistas, músicos, entre otros pudieron mostrar sus talentos a sus compañeros. Esperamos que esta actividad haya permitido celebrar la vida y entregar espacios de recreación, acompañados de instancias educativas, que fomenten el desarrollo de los valores que promueve nuestra institución. Ojalá podamos replicar este festival los próximos años”.
UN LEGADO QUE SE HA EXTENDIDO POR GENERACIONES
A su juicio ¿Qué características convierten al colegio Rauquén en una institución patrimonial?
Macarena Cruzat: “Uno de los elementos más destacados es la trayectoria de nuestro colegio, que a lo largo de los años ha educado a muchas generaciones, manteniendo firmemente su misión y visión, lo que ha generado mucho respeto y valoración en todos quienes integramos la Comunidad Educativa.
En este sentido, el Colegio Rauquén es un espacio que permite el reconocimiento del patrimonio cultural, en todos sus aspectos, destacando no solo elementos culturales nacionales, sino que, además, valora el patrimonio humano. Las personas construyen la realidad desde lo que son, constituyéndose en portadores de cultura.
Para nuestro colegio, cada uno de sus integrantes, con sus conocimientos y costumbres, son parte fundamental de la institución”.
Daniel Azúa: “La historia de esta institución se basa en el patrimonio que ha ido forjando a lo largo de los años, creado bajo el ideal de nuestros fundadores quienes nos legaron su trabajo y testimonio para formar este establecimiento. De ahí parte el patrimonio institucional y se va construyendo con cada generación que pasa por las aulas; en cada estudiante hay un acceso al bien y cada uno de ellos es un reflejo de su propia historia. Este año el lema del festival fue: “Nuestro patrimonio eres tú”, porque el Colegio Rauquén es un patrimonio que no pasa de moda, que está siempre vigente en el corazón de muchos quienes formamos parte de esta gran familia”.
Considerando que el patrimonio cultural es un conjunto de bienes tangibles e intangibles ¿podría mencionar lo que significa para usted ese concepto y que bienes patrimoniales significativos rescataría como persona y ciudadano?
Daniel Azúa: “El concepto patrimonio se halla fuertemente vinculado con la identidad social y cultural de una comunidad, que heredamos de las generaciones pasadas. Gracias a mi interés por la Historia, he podido conocer el legado que han dejado centenares de hombres y mujeres en este lugar que me cobijó desde mi llegada a vivir aquí. Y no solo me quedo con el valioso patrimonio material de esta ciudad, sino también con las vivencias de su gente, que llevo impregnada en mi forma de ser. Gran parte de mi propia historia de vida está escrita gracias al patrimonio de Curicó”.