Desde el año 2002, durante el mes de abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra el Día de la Actividad Física, con el fin de sensibilizar a la población sobre la importancia de practicar ejercicios de manera regular y sistemática para mejorar la salud y adquirir buenos hábitos de vida.
La inactividad es el cuarto factor de riesgo más importante de mortalidad mundial. La actividad física moderada, realizada con regularidad, es una de las maneras más sencillas de mejorar la salud y mantenerse sano, ya que tiene el potencial de prevenir y controlar muchas enfermedades (cardiovasculares, diabetes, obesidad y la osteoporosis), aumentar la capacidad física de las personas y permite mejorar las relaciones interpersonales.
Durante esta semana, el Departamento de Educación Física del colegio desarrollará diversas actividades con el propósito de recordar esta fecha. Conversamos con la profesora Mónica Bozo sobre las acciones que se realizarán, sobre cómo mejorar la condición física de los integrantes de la Comunidad Educativa, considerando los largos meses de confinamiento y sedentarismo que vivimos. Además, nos entrega una pauta de actividades que podemos hacer en familia y al aire libre.
RETOMANDO RUTINAS PARA MEJORAR LA CONDICIÓN FÍSICA DE LOS ESTUDIANTES.
¿Por qué es necesario para nuestro colegio y para la comunidad, que celebremos el Día de la Actividad Física?
M.B: “Es necesario celebrar este día ya que debemos sensibilizar a nuestra Comunidad Educativa sobre la importancia de practicar regularmente actividad física, tanto para nuestra salud física como mental, que se ha visto muy deteriorada durante estos dos años de pandemia. También es importante que nuestra comunidad conozca la diferencia entre deporte y actividad física: el primero se refiere a disciplinas competitivas donde es muy importante la técnica y rendimiento, a diferencia de la actividad física que tiene como objetivo la recreación, mejora de la salud, creación de hábitos de vida sana, lo que podemos realizar todos”.
– Tanto en el regreso a clases hibridas del año pasado, como en el retorno presencial de 2022 ¿se ha notado la falta de ejercicio físico en sus estudiantes? ¿Cómo han trabajado como profesores de Educación Física para revertir los retrocesos?
M.B: “En los cursos más pequeños no se ha evidenciado gran falta de ejercicio; pero en cuanto al área motriz, si hemos visto algunas desventajas en aquellos niños que, por múltiples motivos, no pudieron conectarse o asistir presencialmente al colegio. Actualmente, estamos con muy buena asistencia, por lo que los niños y niñas están avanzando rápidamente y nivelando sus experiencias motrices.
Lo positivo, es que, a los niños de los primeros cursos de nuestra sede de Enseñanza Básica, les encanta hacer actividad física, ellos participan con gran entusiasmo y buena disposición en cada clase. En los cursos mayores si hemos observado mayor falta sedentarismo y falta de dinamismo debido al uso de aparatos móviles y pantallas, por lo que durante las clases estamos aprovechando de ir aumentando gradualmente los tiempo e intensidades de los ejercicios, para poder alcanzar un nivel óptimo donde los estudiantes se sientan bien, menos cansados y con un rendimiento acorde a su edad”.
¿Qué actividades han planificado para conmemorar el Día Mundial de la Actividad Física?
M.B: “El miércoles 13 de abril, durante la jornada de la mañana y tarde, realizaremos circuitos de ejercicios compuestos por estaciones de trabajo, donde nuestros niños y niñas, por turnos y respetando distanciamiento y medidas de higienización, podrán disfrutar de diferentes tipos de rutinas, de coordinación, equilibrio, manipulación, lateralidad y locomoción. También se incluirán ejercicios gimnásticos como volteretas, rodadas, saltos en cama elástica”.
EJERCITÉMONOS EN CASA.
¿Cómo podemos generar conciencia en el hogar sobre la importancia de mantener una constante actividad física? ¿Qué rutinas simples o hábitos sencillos podemos incorporar a la vida cotidiana, para mejorar nuestra condición física y salud?
M.B: “Todos aprendemos a través del ejemplo, esto quiere decir que si vemos en casa que alguno de los integrantes de la familia practica o participa de alguna rutina regularmente, podemos imitarles, como un hábito que nos beneficiará a lo largo de la vida. Entre estas iniciativas podemos mencionar: Participar de algún taller que imparte la Corporación de Deportes de Curicó o la Junta de Vecinos de nuestro barrio; Incorporar alguna actividad durante los fines de semana, como caminatas al aire libre, subir el cerro Condell, salir a un recorrido en bicicleta, bailar en casa o seguir alguna rutina a través de canales de YouTube de profesionales de la actividad física adecuados para la edad de las personas que lo ejecutan.
A los padres, pedirles que les den un espacio a sus hijos luego que llegan del colegio, para que realicen alguna actividad física, como andar en patines, skate, bailar, saltar la cuerda, andar en bicicleta, practicar yoga para niños, etc”.